La elaboración de un vino rosado se realiza como la de un vino blanco. Muy al contrario de lo que se pueda parecer, un vino rosado no se consigue mezclando vino tinto con vino blanco. Vamos a explicar a continuación en que consiste la vinificación del vino rosado.
En primer lugar, cuando las uvas tintas llegan a la bodega se molturan y despalillan. Una vez en el deposito, se dejan en maceración durante 6 horas. Posteriormente se saca el mosto del deposito y se trasiega (cambiar el vino de recipiente) a un deposito nuevo dotado de camisas para que se pueda pasar agua fría por ellas y así refrigerar el deposito.
Seguidamente se pone el mosto a una temperatura de 17Cº y se mantiene así hasta que esté prácticamente fermentado, momento en el que se hace un nuevo trasiego para separarle de las lías. Al no fermentar con los hollejos de las uvas, el color del vino se mantiene bajo y queda rosado en lugar de tinto.
En Bodegas Miguel Aguado puedes encontrar estos vinos rosados:
Vino rosado garnacha San Martineño 2017
Vino rosado garnacha Castillo de Montalbán